Sabías que …
EL ÓNIX piedra de poder para disolver las energías negativas
El ónix es una piedra magnética que atrae magnéticamente las vibraciones negativas, las absorbe y las disuelve.
Si la persona que lleva el ónix se relaciona con alguien que le envía energía negativa (le juzgan, le critican, le envidian, etc. .) con él se encontrará protegida; la piedra atrae sobre sí y anula los malos pensamientos y lasfuerzas mentales negativas.
Al entrar en contacto con el ónix, las personas negativas sienten o notan de alguna manera que pierden su poder y decae su interés en seguir emitiendo energía negativa o desarmonica.
Cuando estamos en contacto con un ónix estamos purificándonos energéticamente ya que el ónix “recoge” la energía caótica que puede haber en nuestro campo electromagnético o aura;
al igual que un colador absorbe y anula las vibraciones negativas que tienden a quedarse “enganchadas” a nuestra aura.
Es importante llevar encima un ónixcuando tengamos que estar en contacto con personas o ambientes poco positivos. El ónix puede ser nuestro amuleto protector manteniendo limpia nuestra aura.
Si colocamos ónix por nuestra casa limpiará y purificará nuestro hogar impidiendo que las impurezas astrales se acumulen.
El ónix absorbe toda vibración que pueda provocar desarmonías.
Como PIEDRA DE PODER que es elónix, se convierte en un aliado con la persona que lo posee y lo trata con respeto, amor y buenas intenciones.
Otras cualidades del ónix son: Serenidad, humildad y confianza, cualidades que a nivel energético son desarrolladas o incrementadas por la frecuencia vibratoria del ónix.
Se sabe que las piedras negras se utilizan en magia negra pero incluso aquí el ónix despliega todo su poder ya que si es utilizada con fines egoístas, la piedra atraerá todo lo negativo y
además lo potenciará y descargará sobre el mago negro convirtiéndolo con el tiempo en víctima de sí mismo.
El ónix disuelve las energías negativas pero también puede sobrecargarse; cuando esto suceda lo intuiremos y procederemos a darle baños de sol / luna, limpiarlo, cargarlo en una Drusa de Cuarzo o Amatista donde lo depositaremos durante unos días hasta que notemos que ha recuperado su brillo.
